Como quisiera entonces decirte con vehemencia cuanto con tu llegada se alegra el corazón
Autor: Teresa Mora J.
Compositor: Manuel de J. Lozano
Si mi alma solo vive llamándote en silencio,
deseando tu presencia como el agua una
flor, ¿por qué, si es que tu llegas y yo
pretendo hablarte, al llegar a los labios
se me muere la voz...?
Como quisiera entonces decirte con vehemencia
cuanto con tu llegada se alegra el corazón,
y con palabras llenas de hondísima ternura
expresarte lo grande, lo inmenso de este amor.
Pero callo infalible, inexorablemente,
y es el triste saludo que tan solo te doy:
un escozor de lágrimas que hablan mis pupilas,
mientras mis labios callan, temblando de emoción.